Nunca es mal momento para dedicar unas líneas a abordar la política de la Unión Europea y sus Estados miembros respecto a los países en vías de desarrollo. En 2018 la Unión Europea y sus Estados miembros contribuyeron con 74.400 millones de a la cooperación oficial al desarrollo, un incremento del 4 % respecto al año anterior, aun excluyendo las donaciones para los refugiados. Esta asistencia colectiva oficial representa el 0,47 % del Ingreso Nacional Bruto de la Unión Europea, y el Consejo Europeo se ha comprometido a aumentarlo hasta un 0.7 % en 2030.
La política de desarrollo de la UE orienta la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, ofreciendo un marco de acción y una visión compartidas a sus Estados miembros respecto a la asistencia a los países en vías de desarrollo. África constituye un foco de atención particular, especialmente desde que en septiembre de 2018 la Comisión Europea lanzara su Comunicación sobre una nueva Alianza África-Europa para la Inversión Sostenible y el Empleo.
En este contexto, la Comisión Europea ha publicado recientemente los resultados de un Eurobarómetro Especial*, realizado por Kantar, acerca de actitudes y opiniones de los europeos alrededor de la cooperación al desarrollo, arrojando datos muy interesantes. Acompáñanos a averiguar qué piensa la ciudadanía europea y española al respecto.
Según el estudio, la gran mayoría de la población europea considera importante la ayuda a las personas de los países en vías de desarrollo. En todos los países esta afirmación la apoyan al menos dos de cada tres personas, superando en España la cota del 90 %. El 70 % de los europeos cree que la lucha contra la pobreza en los países en desarrollo debería ser una de las principales prioridades para la UE; en el caso de España esta prioridad es apoyada por un 80 % de los ciudadanos.
Pero si hablamos de que esta pueda ser una de las principales prioridades de los gobiernos nacionales, la cifra se reduce, con una media europea del 58 %, obteniéndose las proporciones menos favorables en Estonia (17 %) y Letonia (24 %). Sin embargo, los españoles se sitúan de nuevo entre los más favorables, incluso como prioridad nacional, con un 74 % de opiniones favorables. Si hablamos de la inversión económica para ayudar a los países en desarrollo, España es el país de la UE donde mayor proporción de ciudadanos apoyarían el aumento de esta (46 %), mientras la posición mayoritaria en el resto de los países europeos sería la de continuar invirtiendo como hasta ahora.
En este sentido, África es uno de los continentes donde se concentra gran parte de estas ayudas, y para tres cuartas partes de los europeos (y el 88 % de los españoles ) la UE debería reforzar su cooperación con este continente, realizando allí más inversiones económicas para crear trabajos y asegurar un desarrollo sostenible en ambos continentes, el africano y el europeo.
Respecto a cómo son percibidas estas ayudas, sus beneficios y eficacia, este estudio nos revela lo siguiente:
- Nada menos que el 79 % de los europeos, y hasta un 87 % de españoles, cree que beneficia directamente a la UE.
- Por encima de la media europea, los españoles piensan masivamente que estas ayudas sirven para reforzar la posición de la UE en el mundo (84 %), y que contribuyen a un mundo más pacífico y equitativo (88 %).
- Es una forma eficaz de luchar contra la migración irregular para un 87 % de españoles, y para siete de cada diez ciudadanos en toda Europa, una proporción similar a la que sostiene que es una manera eficaz de reducir las desigualdades en estos países, con un mayor nivel de opiniones en esta línea entre los españoles (86 %).
En este punto resulta muy interesante conocer cuáles se consideran que son los principales retos de mayor urgencia para el futuro de los países en vías de desarrollo. Entre el conjunto de europeos encuestados destacan la paz/seguridad y la educación (ambos con un 33 % de menciones), el agua y el saneamiento (32 %) y la salud (31 %). Por su parte, los españoles coinciden en señalar la importancia de la educación (38 %), el agua y el saneamiento (32 %), y la salud (35 %), pero conceden una relevancia mucho mayor al crecimiento económico y al empleo, con un 33 % de menciones frente al 25 % a nivel del conjunto de la UE.
Tras referirnos a las ayudas públicas, no podemos despedirnos sin ocuparnos del sector privado. En ese sentido, tres cuartas partes de todos los europeos encuestados afirman que debe tener un papel importante en el desarrollo sostenible de los países en desarrollo, lo que supone una caída de 5 puntos respecto al dato ofrecido por una ola del Eurobarómetro efectuada el año anterior . En España un 84 % de la ciudadanía sostiene también la importancia del sector privado, con una caída en este caso de 4 puntos respecto al estudio de 2018.
Con estos datos en la mano, y a pesar de los diversos problemas que nos acucian, podemos afirmar, sin duda, que estamos ante una sociedad, la europea en general y la española en particular, solidaria con los países en vías de desarrollo.
Te invitamos a que profundices en este interesante estudio, a través de este enlace donde podrás acceder al informe y material complementario de esta investigación
Un saludo y hasta pronto,
José M. Senent
* 27.464 entrevistas domiciliarias personales, realizadas entre el 7 y el 25 de junio de 2019 a población de 15 y más años, residente en los 28 Estados miembros de la UE (1.007 entrevistas realizadas en España)